En la última semana del invierno, antes de que termine ésta estación, vamos a exprimir los cítricos al máximo. Vamos a aprovechar hasta la última gota de esa vitamina C que tanto necesitamos para seguir toreando catarros y gripes que todavía quieren hacerse los dueños de nuestros queridos y estupendos cuerpecitos.

Sin más prolegómenos, hoy le dedico éste post a las fabulosas Mandarinas, la reina de los cítricos en mi cocina. La pequeña de su cítrica familia. Pequeña ella pero llena de grandísimos beneficios y propiedades para nuestro organismo.

Tartaletas de Mandarinas y Nubes

Tartaletas de Mandarinas y Nubes

Virtuosa mandarina, ¿qué encontramos dentro de ella?:
  • Alto contenido en vitamina C.
  • Alto contenido en antioxidantes.
  • Rica en fibra.
  • Rica en carotenoides y ácido fólico.
  • Bajo contenido en sodio.
  • Alta cantidad en potasio.
  • Baja cantidad de azúcares.

Todo ello la hace indispensable en nuestras dietas. Previene los molestos constipados de las fechas invernales; ayuda a combatir infecciones, es un fruto ideal para que la consuman personas hipertensas, con problemas cardiacos, diabéticas, embarazadas. Las mandarinas son también  un diurético natural.

¿De dónde viene?:

Proviene de las zonas tropicales de Asia. Se cree que su nombre se debe al color de los trajes que utilizaban los Mandarines, gobernantes de la antigua China. Ésta fruta es originaria de China e Indochina. Siendo China el primer país en producción mundial y España el segundo, seguida de Brasil, Japón y Marruecos.

Dentro de la gran familia de las Mandarinas, nos encontramos con tres grupos diferentes: Clementinas, Híbridos y Satsumas, éstas últimas originarias de Japón. Las primeras, las Clementinas, presumen de tener un montón de variedades diferentes entre ellas y son las más conocidas y saboreadas por nosotros.

Mini tartaletas de Mandarinas y Marshmallow

Mini tartaletas de Mandarinas y Marshmallow.

Así que, antes de que se nos pase el mejor momento de ésta deliciosa fruta, os cuento la receta de un postre riquísimo donde se mezclan la dulzura sutil de la mandarina, el chocolate blanco, un toque ácido de fresas y el broche final con una esponjosa mini nube:  «Mini tartaletas de Mandarina y Marshmallow».

En éste caso las tartaletas no las hice yo, las compré en http://www.carrefour.es,  también en http://www.mercadona.es  o en casi todos los supermercados que siempre tenemos a mano… Pero si prefieres hacerlas, sólo tienes que mirar la receta de uno de mis post anteriores, ver Receta de tartaleta, masa sablée. Yo ésta vez, opté por las compradas. No están tan ricas, eso desde luego, pero son muy prácticas para ciertas ocasiones.

– MINI TARTALETAS DE MANDARINA Y MARSHMALLOW:

25 porciones aprox

  • 125 grs de zumo de mandarina.
  • Ralladura de 2 mandarinas.
  • 40 grs de azúcar.
  • 3 huevos o 150 grs de huevo.
  • 100 grs de chocolate blanco.
  • 10 grs de manteca de cacao. De venta en tiendas especializadas.
  • Mermelada de fresa.
  • 25 Mini nubes o «Marshmallow».
  • 2 cajas de Mini tartaletas.

– Lo primero que vamos a hacer es el Cremoso de Mandarina y Chocolate blanco:

1.- En un bol resistente al microondas derretimos la manteca de cacao con el chocolate blanco. Yo éste paso lo hago en la función de descongelar y muy poco a poco, para que no se queme el chocolate. Removemos con una espátula y ligamos bien. La manteca es un producto muy duro. Aseguraros que queda perfectamente fundida… 🙂

2.- En un bol, blanqueamos con unas varillas un poco los huevos con el azúcar y añadimos el zumo de las mandarinas y las ralladuras. Removemos bien. Pasamos a una cacerola y cocemos sin dejar de remover hasta alcanzar los 84ºC. ¡Cuidado no os paséis de temperatura! No queremos tortilla de mandarinas…

3.- Una vez tengamos el cremoso lo vertemos sobre la mezcla del chocolate blanco y mezclamos muy bien. Lo batimos un poco con la batidora de brazo a una velocidad media. Así nos aseguramos de que quede bien mezclada y conseguimos una textura fantástica.

Tapamos «a piel» con un film de plástico y dejamos enfriar en la nevera.

4.- Ponemos una pequeña capa de mermelada de fresa sobre cada tartaleta.

5.- Una vez frío el cremoso, lo pasamos a una manga pastelera con una boquilla pequeña (5 por ejemplo) o sin boquilla si preferís, haciendo un pequeño agujero en la manga … y rellenamos las mini tartaletas. Reservamos en la nevera.

6.- Decoramos con las mini «marshmallow». Podéis decorarlas también con gajos de mandarinas, con trocitos de fresa o una pizca de chocolate blanco.

Mini tartaletas de Mandarinas

Tartaletas de Mandarinas y Nubes

Mini tartaletas de Mandarina , Chocolate blanco y Nubes

Tartaletas de Mandarina, Chocolate y  Marshmallow…

MI SECRETO: Éste cremoso es una versión de un cremoso de limón de una receta de mi escuela Le Cordon Bleu. Yo la he «tuneado» con mandarinas y otras muchas veces con lima y limón. De cualquier forma queda espectacular. Y si ya os lo queréis currar un poco más, la tartaleta clásica está coronada con un rico merengue italiano quemado después con un soplete.

Ya sabes, termina el invierno exprimiendo cada gota y lleno de vitaminas… ¡Qué ganas de primavera…!

¡Gracias por acompañarme en mi rumbo en todas las estaciones…! 😉 ♥

¡¡¡Mmmmmmmm…!!!