«¿Quién me ha robado el mes de abril?¿Cómo pudo sucederme a mí?…»
… Porque sí, seguimos con la primavera más atípica que nos podíamos imaginar. Y aunque en primavera empiezan a llegar a los mercados y «súpers» de barrio un montón de frutas nuevas, este año, el año del confinamiento, el año que nos cambió a todos la vida, eso también es diferente.
Se ha parado el mundo y eso ha provocado que falten o escaseen algunas frutas típicas del mes de abril. Sin embargo, los cítricos siguen teniendo un lugar privilegiado, y afortunadamente siguen abundando en las fruterías, por aquello de la vitamina C, supongo.
Así que hoy me apetece compartir con vosotros la receta de unas natillas de mandarina, que hice el otro día casi por casualidad.
NATILLAS DE MANDARINA:
Para 8 tarrinas:
- 8 galletas tipo María. (También pueden ser tipo Digestive)
- 250 ml de zumo de mandarina.
- 80 grs de azúcar blanco.
- 300 grs de huevos (6 huevos aproximadamente).
- 200 grs de chocolate blanco.
Para la decoración:
- «Besitos» de merengue.
- Chocolate blanco rallado.
- Piel de mandarina rallada y en tiritas.
- Gajos de mandarina.
1.- En un bol, apto para microondas, derretimos poco a poco el chocolate blanco.
2.- En otro bol blanqueamos con varillas los huevos con la mitad del azúcar.
3.- En un cazo calentamos el zumo de mandarina con el resto del azúcar. Cuando esté templado lo vertemos sobre el bol donde están los huevos y mezclamos muy bien.
4.- Volvemos a llevar la mezcla de los huevos y el zumo al cazo, y a fuego medio y sin dejar de remover, cocinamos la crema hasta alcanzar los 82-84º comprobando la temperatura con un termómetro de cocina. Mucho cuidado con pasaros de temperatura 🙂
Si no tenéis termómetro, lo hacéis «a ojo». La crema estará lista cuando veáis que empieza a espesar y se observan una especie de burbujas grandes. Se elabora igual que una crema pastelera.
5.- Retiramos el cazo del fuego, vertemos la crema en el bol donde está el chocolate derretido, mezclamos muy bien. Si lo veis necesario, lo batís un poco con la batidora de mano. Así quedará una crema muy fina. Tapamos con film de plástico «a piel» y dejamos que se enfríe.
MONTAJE, PRESENTACIÓN:
Yo utilicé tarrinas de cristal recicladas, pero podéis usar cuencos, copas anchas, vasos, tarros de cristal pequeños… lo que queráis.
6.- Ponemos una galleta en la base de cada tarima. Vertemos las natillas. Decoramos con unos «besitos» de merengue, ralladura de mandarina, gajos y chocolate blanco rallado.
Servir frío.
Este mismo postre puedes hacerlo con limón ó con naranja y chocolate negro. Está riquísimo siempre y ahora más que nunca es momento de cítricos y de vitamina C.
Ojalá estéis todos bien. Seguid en casa, cuidándoos y cuidando de los vuestros, que ya queda menos. Un día menos para abrazar a los nuestros.
Mientras, gracias, por seguir la luz de mi faro de caramelo.
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